Calidad de las aguas de abastecimiento
El agua es por su naturaleza y abundancia el compuesto químico más importante de todos los que se conocen; determina gran parte de los procesos físicos-químicos y biológicos que se producen en nuestro planeta y es, sin ninguna duda, la base de la vida.
El agua , tal y como se encuentra en la naturaleza, no es un agua pura sino que contiene distintos constituyentes e impurezas que son los que van a determinar la calidad o las cualidades del agua.
Los parámetros que se identifican en un agua pueden agruparse en tres clases: Físicos-químicos, microbiológicos y radioactivos.
El uso de un agua a a estar condicionado por el tipo y/o la concentración de constituyentes o impurezas. En función de éstos podremos utilizar un agua para consumo humano, para uso industrial, agrícola, ganadero o de servicio público.
El agua puede tener distintos orígenes:
- Lluvia o nieve
- Aguas superficiales ( ríos y lagos )
- Aguas subterráneas ( pozos y manantiales )
- Agua de mar
El agua de lluvia es casi agua destilada al proceder de la evaporación de agua de mar o de aguas superficiales. Pero al caer el agua va captando contaminantes atmosféricos que va aumentando la acidez.
Las aguas superficiales presentan una alta concentración de minerales disueltos que van a producir un aumento de la alcalinidad, salinidad y dureza, en función de la naturaleza del terreno por la que discurra el agua.
Las aguas subterráneas están exentas de oxígeno disuelto y presentan alta concentración de CO² que va a facilitar la disolución del Fe y Mn en el agua. Además dichas aguas pueden ser salobres si se encuentran próximas al litoral marítimo.
Las aguas de mar contienen una elevada concentración de sales necesitando un proceso más complicado de depuración para su aprovechamiento.